ESTRUCTURAS
EMBLEMÁTICAS
Existen edificios y complejos urbanísticos comunes a todas las
ciudades hispanomusulmanas: alcazabas, mezquitas, zocos, alcaicerías y
alhóndigas configuran el paisaje urbano de la madina andalusí.
La
alcazaba (Qasaba)
A partir de ella se desarrollaba la madina, por
lo general era la primera construcción que se realizaba al fundarse una ciudad.
Ésta alcazaba recibía distintos nombres: hisn Mérida)
almudayna (Palma de Mallorca) qasr al-hubúr (Denia) o al-hizám (Toledo)
La alcazaba solía situarse en el punto más
elevado de la ciudad, aunque hay excepciones, como es el caso de Sevilla,
Mérida, o Valencia que se encuentran en el centro de la madina.
Dentro de sus propios muros las alcazabas
disponían de todas las estructuras urbanas necesarias: mezquita, palacio,
aljibe, casas, etc. Se puede decir que la alcazaba forma un barrio por sí
misma.
La alcazaba acoge la residencia del poder político, que se manifiesta
de diferentes maneras. Si detrás de sus muros habita el soberano y sus acólitos,
sus murallas cumplen dos funciones, por un lado las meramente defensivas, y por
otro el símbolo del aislamiento del poder político supremo, algo clásico del
mundo islámico que trae como consecuencia la teoría del califa ocultó En los
casos en los que la alcazaba está ocupada por una delegación del poder,
gobernador civil o militar, la alcazaba no suele estar totalmente aislada.
Es interesante señalar la existencia en ocasiones de un espacio no
construido, rodeado de una muralla y enlazado a la alcazaba. Éste recinto es el
conocido como albacar (albacar significa ganado), tenía como
función amparar, en caso de peligro, a los habitantes de la ciudad y a sus
rebaños
Plano de la alcazaba de Almería
Alcazaba de Málaga |
La mezquita (masvid)
Existen dos tipos de mezquitas, la masyid y la masyid yámi (mezquita aljama), ésta última, más espaciosa para que quepan todos
los fieles de la madina para la oración común del viernes, es el núcleo
principal de la ciudad musulmana.
Suele estar en el centro de la ciudad, por ella o
sus alrededores pasan siempre las vías principales de la ciudad, aunque en
ocasiones se encuentra en zonas más periféricas - Córdoba, Murcia - al situarse
contigua a la alcazaba.
La mezquita no sólo cumple
funciones religiosas, tiene funciones judiciales - conflictos civiles -,
notariales - contratos matrimoniales -, debates públicos en sus patios'.
También tenía funciones como madraza (escuela), especialmente para adolescentes y
adultos. Esto estaba muy mal visto por
algunos influyentes personajes, como Ibn Abdun, que en su tratado de hlsba, dice: " Las mezquitas son las residencias de Alláh... por lo tanto no se deben
hacer en ellas reuniones sobre impuestos, procesos, o cualquier otro asunto
mundano.( Tratado de Ibn Abdun,
traducido por Levi Provençal y García Gómez. Madrid. 1948)
También
actúa como centro de expresión del poder - en el Islam la religión y la
política están inseparablemente unidas -, es en la mezquita en donde se
pronuncia la jutba
(comunicados
del califa) por parte del ulema dando
Mezquita de Córdoba
Le escuela (madraza)
No sólo había escuelas dentro de las mezquitas; también había lugares de enseñanza, en esto caso solían estar dedicadas a la enseñanza superior- en otros puntos de la ciudad, es el caso de Granada
Plano de la madraza granadina
4.3 E1
zoco (suq)
El zoco es el elemento
fundamental de la vida económica urbana. Suelen estar situados junto a la
mezquita aljama, aunque también existían pequeños zocos de barrio, el arrabal
de los judíos en Toledo, o zocos esporádicos, como el mercado de caballerías
que se celebraba en Zocodover (Toledo).
Los zocos estaban rigurosamente organizados por
profesiones, por ejemplo el suq al-sarrayin
(zoco de los silleros), o el suq al'attárín (zoco de los especieros) en Sevilla. Su colocación, con respecto a la
mezquita, solía seguir un orden, así los vendedores de perfumes se ubicaban en
la zona más próxima, mientras que los alfareros se encontraban en el punto más
alejado respecto a la misma.
En algunas de las ciudades más importante de
al-Ándalus, existían junto a los zocos establecimientos muy especializados.
como, por ejemplo, el dar al-tiraz en donde se fabricaban telas de seda, con una lujosa
ornamentación, que llevaban el nombre del soberano de turno.
La
alcaicería (al-gaysariyya)
Era una institución
comercial y el edificio o conjunto de edificios que la albergaba. Las
características más acusadas eran:
- Pertenecían al soberano.
- Dentro de ella podían existir varios zocos.
- Era una construcción cerrada, guardada celosamente por vigilantes (surta), con acceso por una o varias puertas que tan sólo se abrían en las horas comerciales.
- En ella se almacenaban y vendían los productos de lujo. o
Estos zocos y alcaicerías
no pueden por menos que hacernos cerrar los ojos e intentar sentir la
mezcolanza de olores, colores, unidos a la algarabía que formaban los
extrovertidos andalusíes.
La alhóndiga (funduq)
El término funduq designa a un establecimiento que
sirve de almacén de mercancías y alojamiento de mercaderes.
Alrededor de un patio
cuadrangular se disponían galerías a las que daban las puertas de las
habitaciones en las plantas altas, y las de las tiendas en el nivel del patio.
Generalmente los productos que se almacenaban eran aquellos que solían escasear
en la madina.
Algunas alhóndigas estaban
especializadas en el almacenamiento de un determinado producto, aceite, carbón,
etc.
Amén de la alcaicería y la alhóndiga, existían
otros establecimientos dedicados al almacenamiento de unos determinados
productos: alhorines, almodins para los productos cereales, zafals o albacaras, para el ganado, etc.
Corral del Carbón (Granada)
El baño (hammám)
El baño es un elemento indispensable del
paisaje urbano andalusí. En el Islam existe una especial preocupación por la
higiene, por otro lado está 1a exigencia de la purificación ritual antes de
realizar las obligadas oraciones - de ahí que generalmente los baños se
encontraban próximos a una mezquita.
En algunas ciudades existían un número
considerable de baños - en Córdoba más de seiscientos en la época de mayor
esplendor de la capital califal -. El uso de los baños se dividía para hombres y
mujeres, bien estableciendo unas determinadas horas para cada grupo, bien
utilizándolos en distintos días de la semana.
Lo conformaban tres salas. La fría, la
templada, y la caliente que solía ser la más
caldera. A veces entrada, lugar en descansar. El baño
era también un lugar de encuentro en donde la sociedad andalusí expresaba su
sociabilidad. amplia y que contenía la existían una cuarta sala ubicada en la
donde los clientes podían desvestirse y
Baños árabes de Jaén
La
Muralla
Separa Físicamente la ciudad y
el campo circundante, actúa tanto como elemento defensivo como de límite de
distintos códigos jurídicos. Se puede decir que es el umbral entre la sociedad
urbana y la sociedad rural.
Se ha tomado
tradicionalmente a la muralla como algo intrínseco a la ciudad musulmana, y
aunque ésta concepción puede ser asumida casi en su totalidad hay que
significar que al-Idrisi señala en ocasiones a ciudades, a las que da la
homologación de madinas, que carecen de ella.
Los materiales empleados
fundamentalmente en la construcción de las murallas son la piedra y la tierra,
utilizándose de forma muy secundaria el ladrillo.
Las murallas islámicas
tienen algunas características. Por un lado están las barbacanas, son murallas anteriores a la principal,
con algo menos de altura. Se colocan delante de las murallas en la parte llana
y asociadas a las torres albarranas. Estas barbacanas impiden al asaltante el
ataque directo a la muralla principal. En Sevilla circundaban las murallas de
la ciudad en todo su perímetro; aún se puede admirar un resto de ella entre las
puertas de Córdoba y de Macarena.
Otra peculiaridad de las
defensas constructivas musulmanas son las torres albarranas.Son torres
destacadas de las murallas más de lo normal y unidas a ellas mediante un muro
puente o pasadizo. Tenían por objeto impedir la aproximación del enemigo a la
barbacana; desde ésta torra podían atacar al enemigo por la espalda. Un ejemplo
de torre albarrana es la Torre del Oro en Sevilla.
Las
puertas (bad)
Dos
funciones cumplían las puertas, por un lado su carácter de ingreso fortificado,
por otro lado cumplían una función fiscal pues en ellas se cobraban impuestos
por las mercancías que ingresaban en la ciudad, y a veces de las que salían.
Las puertas eran cerradas de noche quedando la ciudad incomunicada con el
exterior.
Generalmente las distintas puertas que tenía una madina se unían a
través de las vías más principales de la ciudad. De estas puertas arrancaban
los caminos hacia las ciudades con las que se mantenía una mayor relación, de
ahí que muchas de ellas tuvieran como nombre el de una ciudad: puertas de
Zaragoza y Soria en Calatayud, puerta de Sevilla en Córdoba, o puerta de
Córdoba en Sevilla.
El número de puertas variaba en función de la importancia de la
ciudad, Córdoba con diez puertas, Toledo con once, y Sevilla con quince eran
las ciudades andalusíes que más puertas tenían. »
Había dos tipos fundamentales de puertas: las de ingreso directo, que
tienen la entrada en línea recta, a veces flaqueadas por dos torres, como en la
alcazaba de Mérida, o la Puerta del Sol de Toledo; y las de recodo, éste
dispositivo en recodo es herencia de la arquitectura militar bizantina -
Constantinopla es un claro ejemplo -, al disponer en su interior de uno o
varios recodos se dificultaba la entrada al asaltante, este sistema se
generalizó en los siglos XII y XIII, aunque ya hay casos anteriores como
Madinat al-Zahra.
Puerta en recodo, Medina Azahara (Córdoba)
En casos de asedio se tendía a tapiar las puertas con obra de fábrica,
dejando tan sólo una practicable, también era costumbre que para evitar su
incendio por el enemigo las hojas se forrasen con chapas de hierro bien
clavadas (bad al halid).
Además de las puertas principales existían otras puertas, llamadas de
la traición - Albarracín, Vascos, Antequera -, eran postigos de pequeño tamaño
y generalmente construidas a una determinada altura del suelo, solían
utilizarse para recibir refuerzos - de ahí que en ocasiones se llamarán puertas
del socorro (Toledo, Talavera, Niebla), hacer improvisadas salidas y en último
término huir.
ELEMENTOS
PERIURBANOS
La ciudad musulmana es una ciudad que vive
hacia fuera, al contrario que en las ciudades cristianas en las ciudades
islámicas hay una gran actividad extramuros, y no sólo de actividades que
sirvieran para el solaz de sus habitantes, sino también actividades políticas y
religiosas.
La
musallá
Un precepto islámico es que la
oración del viernes ha de ser comunitaria. El crecimiento de algunas ciudades,
a pesar de contar con varias mezquitas, imposibilitaba el reunir a toda la
población para estas oraciones.
Esta imposibilidad de
reunir a toda la umma justifica la creación de unos amplios espacios
extramuros para realizar las oraciones de las grandes fiestas.
Solía disponer de un mihrab, y en ocasiones de una pequeña construcción con una fuente para poder realizar
las abluciones.
Está documentada la
existencia de musallás en Madinat al-Zahra, Murcia, Valencia, Granada, Sevilla,
entre otras muchas poblaciones de al-Ándalus.
La
musara
Era una explanada dedicaba a los
ejercicios ecuestres. las paradas militares y en general a servir para el
esparcimiento público. En muchas ocasiones ocupaban el mismo espacio que la
musallá - éste parece ser el caso de Sevilla -
Una musara excepcional por
su situación intramuros se cita en Segovia en una carta real de 1412 sobre el
apartamiento de los judíos.
El cementerio (magbara)
Se ha venido manteniendo tradicionalmente que
el cementerio musulmán es siempre extramuros, ésta teoría está siendo
cuestionada hoy en día por las hipótesis de algunos historiadores, este es el
caso de Julio Navarro Palazóng. El mantener que son un -fenómeno
periurbano ha generado desenfoques cuando se han encontrado dentro de las
murallas, generalmente se explica manteniendo que al crecer la ciudad esta le
ha englobado. Se justifica esta tesis en que las fuentes mencionan que los
cementerios se encuentran junto a las puertas, pero ninguna fuente indica si es
en la parte exterior o interior.
Siguiendo
la teoría del investigador Julio Navarro al fundarse la madina ésta tiene sus
elementos dentro, incluyendo los cementerios. Sólo cuando la ciudad se extiende
y va eliminando los espacios verdes empieza a producirse la salida de la madina
de los cementerios por la necesidad del espacio. En definitiva esta hipótesis
defiende que el cementerio es periurbano sólo en las fases más avanzadas de la
madina, no en el momento fundacional. Un ejemplo de ésta teoría es el
cementerio de santa Eulalia en Murcia, fundado en el ai~~lo IX dentro de una
casa, que presenta enterramientos posteriores al momento de creación del
recinto; otros ejemplos son Orihuela o Pechina. Los cementerios musulmanes
extramuros, no tenían vallado, solían ubicarse junto a los caminos de acceso a
las puertas principales de la ciudad.Son frecuentes en el interior de las ciudades
las qubbas
pequeñas capillas que albergaban el sepulcro de algún
santón o asceta; también son frecuentes los enterramientos en el interior de
los alcázares, o la existencia de una rawda - cementerio donde son
enterrados los miembros de la familia que está en el poder -
Ubicación de los cemenetrios musulmanes en Murcia
La almunia
Para algunos es una
propiedad de recreo exclusivamente, otros en cambio le otorgan también
funciones agrícolas, ésta última teoría parece ser la más acertada, partiendo
de la base que la almunia vendría a mantener la tradicional erección de palacetes
campestres, los conocidos como palacios del desierto, que servían tanto para
solaz de su propietario como para la explotación agropecuaria.
Hay almunias documentadas en Córdoba, Sevilla,
Valencia, Toledo (Huerta del rey) etc.
Otras instalaciones periurbanas
Solía haber con frecuencia,
en los alrededores de las ciudades, pequeñas ermitas (rábitas) en donde vivían
ascetas bien en solitario, bien acompañados de algunos de sus discípulos.
También se han constatado cerca de las puertas
de acceso de lagunas madinas unos espacios con funciones comerciales muy
específicas. Destaca el mercado de intercambios entre la ciudad y el campo.
Originariamente estos espacios comerciales no disponían de instalaciones fijas,
pero muchas veces estos mercados se van volviendo estables llegando a provocar
la creación de un arrabal en torno a él.
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